La iglesia de Santa María Magdalena aparece ya mencionada en 1126, es
por tanto una de las iglesias más antiguas de la ciudad, construida tras
la reconquista cristiana de Zaragoza en 1118. Esto hace suponer que con
anterioridad al templo actual, hubo otro románico, que fue demolido y
ampliado, como ocurrió con otras iglesias medievales zaragozanas.
El elemento más sobresaliente es su magnífica torre mudéjar, de planta
cuadrada, que sigue el modelo de las torres turolenses de San Martín y
El Salvador. Su estructura responde también al modelo de alminar
almohade, como en la iglesia de San Pablo. Los motivos ornamentales son
los tradicionales en la arquitectura mudéjar presentando arcos
mixtilíneos, ventanas abocinadas en arco de medio punto y paño de cruces
formando rombos, todo esto enriquecido con piezas de cerámica vidriada,
muy característico del arte mudéjar aragonés.
La iglesia de Santa María Magdalena aparece ya mencionada en 1126, es
por tanto una de las iglesias más antiguas de la ciudad, construida tras
la reconquista cristiana de Zaragoza en 1118. Esto hace suponer que con
anterioridad al templo actual, hubo otro románico, que fue demolido y
ampliado, como ocurrió con otras iglesias medievales zaragozanas. El
edificio actual puede fecharse en la primera mitad del siglo XIV y ha
sufrido un reforma barroca, tal vez una de las más respetuosas con el
original mudéjar. Su tipología sigue los modelos mudéjares de Aragón,
con una nave única, cubierta con bóveda de crucería, capillas laterales
entre los contrafuertes y cabecera poligonal.
El elemento más sobresaliente es su magnífica torre mudéjar, de planta
cuadrada, que sigue el modelo de las torres turolenses de San Martín y
El Salvador. Su estructura responde también al modelo de alminar
almohade, como en la iglesia de San Pablo. Los motivos ornamentales son
los tradicionales en la arquitectura mudéjar presentando arcos
mixtilíneos, ventanas abocinadas en arco de medio punto y paño de cruces
formando rombos, todo esto enriquecido con piezas de cerámica vidriada,
muy característico del arte mudéjar aragonés.
El templo sufrió una reforma en el siglo XVIII, en la que se invirtió
su orientación abriéndose una entrada en el ábside mudéjar y
construyéndose otro presbiterio en el lado opuesto.
En el interior sobresale retablo mayor y las imágenes situadas en la
nave, obra de José Ramírez de Arellano. Poseyó un retablo de Damián
Forment que hoy se conserva troceado en dos capillas del templo.
Historia
Construcción original, Siglo XIVLa actual iglesia de la Magdalena fue construida a mediados del siglo XIV. Es uno de los edificios más representativos del mudéjar zaragozano.
Reforma, Siglo XVIII
Entre 1727 y 1730 los arquitectos Juan Yarza y Romero y su hijo José Yarza Garín reorientaron el edificio. La puerta que hasta entonces estaba situada en la calle Mayor se abrió en la cabecera del ábside y se construyó un nuevo presbiterio en el lado opuesto. En el interior también se enmascaró la estructura mudéjar de la iglesia
Declaración, Siglo XX (1931)
La iglesia de Santa María de la MagdalenaI fue declarada Bien de Interés Cultural por Decreto del Ministerio de Instrucción Pública y Bellas Artes de 3 de junio de 1931, publicado en la Gaceta de 4 de junio de 1931.
El Boletín Oficial de Aragón del día 21 de enero de 2002 publica la Orden de 28 de diciembre de 2001, del Departamento de Cultura y Turismo, por la que se completa la declaración originaria de Bien de Interés Cultural de la denominada Iglesia de Santa María Magdalena, conforme a la Disposición Transitoria Primera de la Ley 3/1999, de 10 de marzo, de Patrimonio Cultural Aragonés, incluyendo el plano de delimitación de la iglesia y el entorno afectado por la declaración.
Restauración, Siglo XX
En 1970 Francisco Íñiguez Almech llevó a cabo la restauración de la torre, eliminando parte de las reformas barrocas y devolviendo a la torre su aspecto original.
Restauración, Siglo XX al Siglo XXI
Entre 1991 y 1992, tras unos estudios de sobre el estado de conservación del templo, se realizaron una serie de intervenciones con carácter de urgencia para evitar daños provocados por las aguas pluviales y las humedades.
En 1997 se llevaron a cabo obras menores en el templo.
Entre los años 2001 y 2003, mediante un convenio de colaboración firmado por el Gobierno de Aragón, Caja Inmaculada y Arzobispado de Zaragoza, se intervino en la estructura del templo en general, limpieza de las fachadas y de la torre, impermeabilización de las cubiertas y mejora del sistema de evacuación de aguas, entre otras actuaciones.
Entre 2005 y 2009 el Ministerio de Fomento, el Arzobispado de Zaragoza y el Gobierno de Aragón (en colaboración con el Fondo Europeo de Desarrollo Regional) promovieron la continuación de los trabajos de restauración y consolidación de la estructura del templo y del saneamiento exterior del edificio. También se restauró la portada mudéjar descubierta en la calle Martín Carrillo en en año 2003.
http://www.patrimonioculturaldearagon.es/bienes-culturales/iglesia-de-la-magdalena-zaragoza
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